Jueves, 24 de Mayo de 2021

¿Cómo actuar frente a los accidentes caseros?

La cocina es el lugar de la casa donde se producen la mayor cantidad de accidentes y le sigue el baño, por lo que tu pequeño no puede quedar solo en ningún momento. La idea es prevenir y preparar tu hogar para la curiosidad de tu niño. Sin embargo, siempre existe la posibilidad de algún contratiempo, por lo que debes saber cómo actuar frente a los accidentes caseros y tomar así la mejor decisión. Aquí te ayudamos a saber cómo reaccionar y mantener la calma durante estas circunstancias.

En el hogar hay muchos lugares donde tu pequeño puede accidentarse: la cocina y el baño son los sitios más peligrosos.

Atención con las puertas y muebles

En el hogar hay muchos elementos que pueden ser perjudiciales para tu pequeño, sobre todo desde el momento en que empieza a gatear y a descubrir todo lo que lo rodea. Si a pesar de todas las medidas que has tomado tu bebé se accidentó, pon atención a las siguientes recomendaciones:

Si se aprieta los dedos con la puerta y éstos se encuentran morados, coloca un poco de hielo envuelto en un paño sobre la lesión. En caso que tengas dudas de una posible fractura, la pediatra y vice presidenta de la Rama de Neonatología de la Sociedad Chilena de Pediatría, doctora Margarita Samamé, recomienda consultar con un traumatólogo.

Si se golpea la cabeza y se desmaya o le aparece una hinchazón. La especialista aclara que en caso de pérdida de conciencia, no debes movilizar al pequeño. Deja sus ropas sueltas y revisa la permeabilidad de la vía aérea. Luego trasládalo al servicio de urgencia más cercano, ello si es que no es posible que un móvil de emergencia llegue hasta tu domicilio.

Si es necesario deben realizarse maniobras de reanimación. La doctora Samamé explica que existen manuales especializados para recién nacidos, lactantes y adultos emitidos por la Academia Americana de Pediatría. Es importante que conozcas la técnica adecuada, consulta con tu médico para una capacitación.

Toma una colilla del cenicero y se quema los dedos: en caso de cualquier quemadura, retira la zona afectada y coloca frío sobre ella. Si la herida es más profunda y a tu pequeño le sale una ampolla, cúbrela con una gasa y consulta en un centro especializado, según la extensión y profundidad de la lesión.

Patio y cocina

Como te contábamos, la cocina es el lugar donde se producen los accidentes caseros más comunes, precisamente por la gran cantidad de elementos peligrosos que se acumulan en este lugar, y frente a los cuales debes estar atenta para que tu pequeño no corra riesgos. De todos modos, y en caso de algún incidente, presta atención a los siguientes consejos:

El bebé toma un cuchillo o unas tijeras y se corta. La doctora explica que en estos casos, la zona afectada debe ser aseada con agua, secada con una toalla limpia y apretada. En caso que no cese el sangrado pasados unos cinco minutos, debes mantener la compresión y trasladar al niño a un servicio de urgencia.

Manipula la puerta de la lavadora y sus dedos quedan atrapados. Si sus deditos quedaron atascados, lava su herida con agua y coloca frío sobre ella. Recuerda consultar a un traumatólogo si sospechas de una fractura.

Lo muerde un perro u otro animal en el patio. La pediatra señala que en estos casos la conducta varía si el perro es conocido o no y si el animal fue provocado, de ello depende la colocación de la vacuna antirrábica. De todos modos “debe realizarse un aseo de la zona con agua abundante y trasladar a un servicio de urgencia”, acota la especialista.

En el baño

El baño es precisamente el segundo lugar con mayor incidencia de accidentes caseros protagonizados por niños, ello a causa de la gran cantidad de agua que allí se reúne y algunos elementos que pudieran resultar peligrosos. En caso de accidente, pon atención a las siguientes recomendaciones:

Se cae en el WC, queda con su cabeza dentro y los pies colgando. La especialista explica que un niño nunca puede quedar solo en un lugar donde exista agua estancada, ya que son suficientes sólo 10 centímetros de agua para que se ahogue, esto incluye la tina, el wc, piscina, balde de agua u otro elemento de similares características.

En todos estos casos, la pediatra Samamé recomienda “retirar al niño o niña del agua, estimular al tacto y poner en posición para eliminar el cuerpo extraño. Es decir, apoyar el tórax sobre una superficie dura, con el niño o niña mirando hacia el suelo y golpear la espalda entre los omóplatos para eliminar la obstrucción de la vía aérea”.

En palabras de la especialista, se realiza el mismo procedimiento en caso de cuerpos extraños sólidos. “Si no se logra la recuperación del color y frecuencia cardiaca, se debe consultar a un servicio de urgencia. De constatar que no respira o que el pulso es muy débil, se deben iniciar maniobras de reanimación y no abandonarlas hasta llegar a un centro de urgencia, de ello depende el pronóstico neurológico del paciente”.

Recuerda siempre mantener la calma y consultar con tu médico frente a cualquier duda. Infórmate y capacítate respecto a cómo actuar en los procesos de reanimación, siempre es bueno que estés preparada frente a cualquier eventualidad.

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